
La carrera electoral en Ecuador entra en su recta final. El próximo 6 de febrero de 2025 culminará oficialmente la campaña electoral, según la disposición del Consejo Nacional Electoral (CNE). A partir del 7 de febrero inicia el silencio electoral, que restringe cualquier tipo de difusión proselitista, y el 9 de febrero, los ecuatorianos acudirán a las urnas para definir el futuro del país.
Las encuestas realizadas antes de la prohibición de su publicación reflejan un alto nivel de indecisión entre los votantes. Según Cedatos, hasta el 30 de enero, el 34,5% de los electores no había decidido su voto. Ipsos reportó un 22% de indecisos hasta el 24 de enero, mientras que Comunicaliza registró un 11,5% en esa misma fecha.
Redes sociales, el último bastión de los candidatos
En esta última semana, los candidatos intensificarán sus esfuerzos en busca de conquistar a los indecisos y a los votantes jóvenes. Las redes sociales jugarán un papel clave, permitiendo una campaña más directa y sin las restricciones que impone el CNE a la publicidad tradicional.
«El desafío es realizar una campaña creativa para captar voluntades. Creo que en estos últimos días veremos una mayor presencia de los candidatos en redes sociales, más que en recorridos o cierres de campaña masivos», señala un analista político. «Intentarán convertir cada ‘me gusta’ y cada vista en un voto, aunque esto no siempre sea efectivo».
Sin embargo, se espera que el contenido digital priorice el impacto sobre la profundidad. «Veremos candidatos haciendo cualquier gracia en lugar de debatir propuestas de fondo», comenta otro experto. En este tramo decisivo, el populismo tradicional podría ser una estrategia recurrente para atraer a los electores indecisos.
El peso del voto oculto
Alfredo Espinosa, analista electoral, advierte sobre la existencia del «voto oculto o vergonzante», que hace que algunos electores no revelen su decisión hasta el momento de votar. Según sus proyecciones, esos votos podrían inclinarse en favor de Daniel Noboa (ADN), Luisa González (Revolución Ciudadana), Andrea González (Partido Sociedad Patriótica) o Leonidas Iza (Pachakutik).
Además, no se descarta que en redes sociales proliferen estrategias de «campaña sucia» en un intento de desacreditar a los rivales y captar la atención de un electorado indeciso.
Con solo días para el cierre de la campaña, los candidatos redoblan esfuerzos en la conquista de votos, en una elección que podría definirse en los últimos instantes.