Tres hojas tamaño A4 pegadas sobre el letrero que identifica el edificio de la Vicepresidencia de la República, en el Centro Histórico de Quito, han captado la atención de quienes transitan por la calle Benalcázar. Estas páginas corresponden al Decreto Ejecutivo 490, firmado por el presidente Daniel Noboa el pasado 23 de diciembre.
El decreto, que agradece los servicios de Sariha Moya como vicepresidenta encargada y asigna a Verónica Abad un rol temporal en la Embajada de Ecuador en Turquía, ha generado controversia y mantiene cerradas las puertas del edificio de la Vicepresidencia.
El contexto del Decreto Ejecutivo 490
El Decreto Ejecutivo 490 se emitió tras la restitución de Verónica Abad como vicepresidenta, luego de que una suspensión impuesta por el Ministerio de Trabajo fuera levantada por una sentencia judicial el mismo 23 de diciembre. Sin embargo, la reincorporación de Abad ha estado rodeada de tensiones. Ese día, al intentar ingresar al edificio de la Vicepresidencia, encontró las puertas cerradas.
El decreto también establece que Abad debía asumir funciones temporales como consejera económica en la Embajada de Ecuador en Turquía, con sede en Ankara, desde el 27 de diciembre. Sin embargo, Abad no ha viajado y permanece en el país, solicitando vacaciones y pidiendo al presidente Noboa, mediante un oficio, cesar lo que ella calificó como «intimidación».
El cierre administrativo del edificio
El mismo 23 de diciembre, el Ministerio de Trabajo, mediante un oficio firmado por la ministra Ivonne Núñez, dispuso que los servidores públicos de la Vicepresidencia trabajen bajo la modalidad de teletrabajo «hasta nueva disposición». Esta medida busca facilitar las acciones administrativas necesarias para implementar el Decreto Ejecutivo 490.
Además, el oficio detalla que para aquellos puestos que no pueden operar bajo teletrabajo, se planificarán recuperaciones de días laborados.
Como resultado, desde el 24 de diciembre, no hay personal laborando físicamente en el edificio, lo que explica el cierre de sus puertas.
Impacto político y operativo
El cierre de la Vicepresidencia y la incertidumbre sobre el futuro de Abad han encendido el debate político en el país. Mientras tanto, los ciudadanos esperan que la situación se resuelva para garantizar la operatividad de una de las principales instituciones del Estado.
Por ahora, el edificio de la Vicepresidencia sigue siendo un símbolo del tenso panorama político que atraviesa Ecuador en este cierre de año.